Del total de mujeres certificadas, 20 viajaron hasta Cali para recibir el certificado de manera presencial. Llegaron desde Manizales, Bogotá, Chinchiná, Boyacá, Popayán y Pereira, así como de distintos municipios del Valle del Cauca. Esta diversidad territorial evidencia el alcance del proceso y la articulación entre comunidades artesanas de distintas regiones.
La certificación se otorgó en la norma de competencia 250701156: Elaborar piezas según métodos artesanales y tipo de material, perteneciente a la Mesa Sectorial de Artesanías. Según explicó Howard Osorio, líder del área de Certificación por Competencias Laborales del CDTI, el proceso incluyó evaluaciones tanto virtuales como presenciales, con visitas a los talleres donde las artesanas desarrollan su labor. Allí se verificaron evidencias, se aplicaron pruebas técnicas y se realizaron los juicios evaluativos conforme a lo establecido en el manual de evaluación por competencias laborales del SENA.
Osorio destacó que muchas de las participantes contaban con conocimientos transmitidos de forma empírica, que ahora quedan formalmente certificados. Con este documento, las artesanas podrán acceder a nuevos mercados, fortalecer sus unidades productivas y lograr una mayor proyección dentro de sus comunidades y en otros sectores económicos.
“El propósito es validar un talento ancestral, pero también contribuir a que estas mujeres sigan consolidando sus iniciativas productivas. La economía popular se fortalece cuando reconocemos el valor de sus oficios y generamos oportunidades de crecimiento para sus familias”, señaló Osorio.
La jornada concluyó con un agradecimiento a las lideresas de la comunidad artesana, especialmente a las del Valle del Cauca, cuyo acompañamiento permitió consolidar este ejercicio colectivo que buscó reconocer el oficio, fortalecer las iniciativas productivas y abrir camino hacia nuevos mercados.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por escribirnos.